martes, 11 de octubre de 2011

DOS LIBROS DE VIAJES: EL INFINITO VIAJAR, de CLAUDIO MAGRIS + IMÁGENES DE PRAGA, de JOHN BANVILLE

De manera habitual, cada libro que leo y me parece interesante tiene una entrada propia en selecciónARTE. En cambio, hoy comento dos libros, porque los he leído en paralelo –cosa que hago pocas veces: no suelo leer simultáneamente dos libros del mismo estilo y temática similar- y tienen algunas cosas en común, así que puede ser buena idea hablar de ellos a la vez.

Cuando comenté EL DANUBIO, ELENA me recomendó que leyera EL INFINITO VIAJAR: si me había gustado el primero pensó que también me gustaría el segundo (acertó); lo compré antes de irme a PRAGA, pero quedó encima de la mesa. Después cayó en mis manos EL MAR: ya dije que no conocía al autor, pero investigando vi que había escrito IMÁGENES DE PRAGA, y lo busqué hasta que me lo prestaron. Los dos me apetecían, así que los arranqué a la vez para ver cuál se imponía: la realidad es que ninguno se impuso, y han corrido en paralelo hasta el final.

El libro de MAGRIS me ha parecido mejor que el de BANVILLE, aunque los dos tienen interés, especialmente para los que nos gustan los libros de viajes. EL INFINITO VIAJAR es una recopilación de artículos publicados por MAGRIS en el CORRIERE DELLA SERA, ordenados geográficamente: recorre Europa desde Tielmes (sí, nuestro Tielmes, a dos pasos de Madrid) hasta Noruega, y al final añade unos capítulos dedicados al medio y lejano oriente; como en EL DANUBIO, allí por donde el autor pasa nos va contando del sitio, de las gentes que lo habitan, de su historia y de su cultura: no tienen tanta calidad como EL DANUBIO, pero tampoco se queda corto, resulta casi siempre interesante y enriquecedor.

IMÁGENES DE PRAGA nos cuenta los recuerdos que BANVILLE conserva de sus viajes a PRAGA, que son ya unos cuantos, y al hilo de esos viajes nos descubre la ciudad y sus personajes. Algunos son muy conocidos: el fotógrafo SUDEK, los emperadores CARLOS IV y RODOLFO II (¿le recordáis retratado como Vertumnus?), los astrónomos TYCHO BRAHE y KEPLER; otros, en cambio, son gente normal de PRAGA –muchas veces escritores o profesores entre los que BANVILLE se mueve- que han vivido (¿o debo decir sufrido?) los avatares más recientes de la historia de la ciudad.

¿Qué tienen en común los dos libros? Para empezar, lo más obvio: los dos son libros de viajes. Además, en los dos recorremos la ciudad de PRAGA, a la que MAGRIS dedica un par de capítulos. Y por si eso fuera poco (mucho no es, la verdad), BANVILLE nos cuenta un encuentro con MAGRIS, con quien coincide en una reunión en PRAGA y en la que el italiano presenta a EDUARD GOLDSTÜKER al irlandés. También hay otro aspecto que me ha llevado a relacionar los dos textos, pero no es una similitud, sino una diferencia: en un caso comparto las ideas –al menos casi todas las ideas- del autor, y en cambio en el otro no coincido nada –o casi nada- con sus opiniones. Me ha interesado mucho lo que cuentan los dos, me parecen apasionantes el propio viaje, la historia o la cultura que van saliendo al paso, pero cuando buscan una interpretación que explique los sucesos, la cosa cambia. MAGRIS es sutil, sus opiniones son matizadas, muchas veces resultan sugerentes, y aunque a veces el lector no está de acuerdo con lo que lee, suele encontrar margen para pensar. En cambio, BANVILLE cae en el tópico con mucha frecuencia, repitiendo ideas manidas y en mi opinión rancias, estereotipadas; pretende ser cáustico y resulta vulgar. Además, hay en el texto (indudablemente bien escrito) un excesivo compadreo en el tono, que acaba siendo, en mi opinión, poco apropiado. Una lástima, porque siendo un libro interesante, IMÁGENES DE PRAGA no me ha parecido ni mucho menos redondo (EL INFINITO VIAJAR tampoco lo es, pero le saca muchos cuerpos de ventaja …).

5 comentarios:

Carol dijo...

No me parece mal esa lectura en paralelo, al final ha sido un acierto porque has sacado cosas más positivas de uno que de otro, muy interesantes, sí señor. Un abrazo

Maribel dijo...

Hola Gaztelu, veo muchas referencias interesantes que me llevan a estos libros, el retrato de Rodolfo II, lo que disfruté en el Clementinum con la figura de Tycho Brahe...no puedo sino agradecerte estos dos descubrimientos para unos apasionados de Praga.
Lo de la lectura en paralelo me parece más que interesante, yo cada vez noto más como unos libros influyen en otros, ya que es habitual que tenga 4 o 5 al mismo tiempo, y en los libros de viajes la "nueva obra" se edita en tu cabeza acompañando la visita, los recuerdos....
Un abrazo ;-)

xGaztelu dijo...

CAROL, es verdad que no ha sido mala experiencia: la comparación siempre ayuda a valorar mejor los elementos comparados, y -como dice MARIBEL- un texto influye en otro ...

MARIBEL, seguro que son más bien re-descubrimeintos, cuestiones ya conocidas pero escondidas entre otras mil -PRAGA da para mucho más de mil cosas interesantes- que de pronto surgen de nuevo y nos hacen volver a disfrutar. Qué cierto es eso que dices de que la obra se edita en tu cabeza: cuando conoces los sitios es fantastico leer sobre ellos, porque los construyes de nuevo, los re-vives, los re-disfrutas. Con estos libros me ha pasado: ha sido como re-visitar PRAGA.

xG

loquemeahorro dijo...

Sí que recuerdo El Danubio y la recomendación de Carol, y los cuadros, que me han vuelto a recordar que no he ido a verlos a la San Fernando.

Buenas recomendaciones, me apunto especialmente "El Infinito Viajar"

xGaztelu dijo...

LOQUE, hay que leerlo con calma, pero EL INFINITO VIAJAR vale la pena. Y EL DANUBIO, más (eso sí: todavía más calma ...).

xG