viernes, 27 de junio de 2008

LA PEQUEÑA CRÓNICA DE ANNA MAGDALENA BACH


Acabo de terminar de leer LA PEQUEÑA CRÓNICA DE ANNA MAGDALENA BACH, un libro que me recomendó alguien del que me fío en temas literarios y que sabe de música mucho –muchísimo- más que yo.

En LA PEQUEÑA CRÓNICA, la soprano ANNA MAGDALENA WILCKEN, segunda mujer de JOHANN SEBASTIAN BACH narra la vida de su familia, centrada lógicamente en su marido. Se trata de un relato intimista y doméstico (pequeño, como dice el título) escrito por una mujer que no sólo quiere a su marido sino que le tiene auténtica devoción, y que además es completamente consciente de estar compartiendo su vida con un genio (digo lo de la devoción porque como se verá enseguida, a veces el cariño es tal que filtra la realidad, la suaviza, justifica todo, llegando en ocasiones casi a contradecirse).

Es libro, estructurado en pocos capítulos, arranca cuando BACH ya está muerto y GASPAR BURGHOLT, discípulo favorito del músico, sugiere a ANNA MAGDALENA que deje por escrito sus recuerdos para que no se pierdan. Así, poniendo en boca de otros lo que ella no ha vivido y en la suya propia el resto, va poco a poco relatando de manera sencilla la vida de BACH en Eisenach, Ohrdruf, Lüneburg, Weimar, Köthen y Leipzig: su nacimiento en 1685 en el seno de una familia de músicos; la muerte de su padre y la vida con su hermano; su primer matrimonio con su prima MARÍA BARBARA BACH; el segundo con ANNA MAGDALENA; el traslado a Leipzig; sus dificultades con el Consejo de la Escuela de Santo Tomás; el crecimiento de la familia y la pérdida de varios hijos; sus métodos didácticos; su éxito; su muerte a última hora de la tarde del martes 28 de julio de 1750.

ANNA MAGDALENA presenta a BACH con un carácter tenaz (37), caprichoso (37), rígido (38), obstinado (38), que estallaba con facilidad (99), testarudo y colérico a la hora de defender sus derechos (129); y a la vez auténticamente humilde –ejemplar el reto de MARCHAN- (37, 45), agradecido (45), ordenado (57), familiar y doméstico (51, 67), alegre y chistoso (66), sensible y tierno como el clavicordio, su instrumento preferido (97), hospitalario (139), económico y ahorrador (142), dispuesto a aprender de todos (173).

El eje principal de la vida de BACH, junto con la música, es la religión. Era el hombre más religiosos que ANNA MAGDALENA había conocido en su vida (55). La religiosidad de BACH es intensísima: LUTERO había producido en él, desde su infancia, una profunda impresión (26), y poco a poco había ido adquiriendo todas sus obras (91). Dios había impreso en su alma la vocación de músico y había hecho de él lo que era: un músico religioso (33). En cuanto a sus lecturas, le interesaban sobre todo los libros de teología(35). Consideraba que los acontecimiento ordinarios de la vida son lecciones que Dios da a los hombres (44). Escribió toda su música bajo la advocación “In Nomine Jesu” (64) y al final de sus primeras partituras escribió siempre “Soli Deo Gloria” (65). Debía deprimirle ver que todos demostraran más interés por la ópera que por la música religiosa (90)

La música que BACH compone es una música más propia para Dios que para reyes (39), que no se puede escribir en un entorno cualquiera, requiere de una situación adecuada, de paz (43). BACH compone todo tipo de música, pero la música sagrada es lo principal para él, expresión adecuada de una personalidad profundamente religiosa (52), aunque algunas zarabandas expresaban muy bien su espíritu (60).La música más noble de BACH se la inspiró siempre la idea de la muerte (48). Su fecundidad musical era como un árbol frutal: si se perdía una composición, no le daba importancia, “escribiré otra” (64). Componía como si Dios mismo le dictase (88), y el cielo será un poco menos cielo si allí no se puede escuchar la música de BACH (46). Mucha de la música que escribió BACH no se oyó más que una vez (122). La música que BACH compone lleva a la gente a ser mejor (144)

En cuanto a su trabajo, BACH se nos presenta como el que sabe que su genio se hace eficaz sólo si trabaja con esfuerzo, aprovechando el tiempo que ve como un don de Dios (34).

ANNA MAGDALENA en una mujer profundamente enamorada de BACH (29), a quien nunca se acostumbró (145) consciente de que vive con un genio y que no merece alegría de compartir su vida con él (58), asombrada y como un sueño por su suerte (59). Dedicada al 100% a su familia (102), sabe hacerse fuerte junto a su marido ante la pérdida siete de los trece hijos que tienen (127). Tiene la visión profética necesaria para advertir el valor de la obra de BACH y su peso futuro, su eternidad, aunque cuando escribe son sus hijos Friedemann y Manuel quienes parecen más geniales que su padre (89, 156). Desde que se queda viuda, ANNA MAGDALENA no puede oír un órgano: prefiere leer la música, y recordar (163).

Después de todo lo dicho sólo queda recordar que he jugado a lo mismo que la autora del libro: como la novela, toda mi reseña es una ficción: porque el texto no fue escrito por la segunda mujer de BACH, a pesar del empeño por no desvelarlo en las ediciones españolas. Lo escribió la inglesa ESTHER MAYNEL, profesora de música, en 1925. Se trata, pues de una novela histórica, y como tal –basada en hechos reales, y parece que con una gran comprensión del protagonista y de su obra- dibuja al BACH que le interesa, cargando la mano en lo que quiere resaltar y pasando de puntillas sobre aquello que prefiere olvidar. De todo lo dicho arriba, pues, vaya usted a saber dónde están engañándonos y dónde no, dónde acierta la autora y dónde se equivoca.

Hay que reconocer, en cualquier caso, que el personaje de ANNA MAGDALENA le sale redondo a MEYNELL, y el BACH que presenta es perfectamente posible: a algunos conocedores del secreto todo lo que escribe les puede parecer una enorme cursilada, empalagosa; pero para los más leer esta novela es, sin duda, una experiencia interesante y despierta de nuevo el apetito de “volver a SEBASTIAN”, de escuchar otra vez su música.

LA PEQUEÑA CRÓNICA DE ANNA MAGDALENA BACH. Editorial JUEVNTUD, Colección Libros de Bolsillo Z, nº 275 (los números señalados entre paréntesis remiten a las páginas correspondientes de esta edición).

martes, 24 de junio de 2008

SANTA CRUZ DE TENERIFE


Por motivos profesionales he tenido que volar a SANTA CRUZ DE TENERIFE en un viaje relámpago. Hacía cuatro años que no iba para allá, y he encontrado la ciudad bonita, con la clase de siempre, cuidada (un poco sucia también, todo hay que decirlo). En un hueco entre reunión y reunión sugerí la posibilidad de ir a ver la sede del Gobierno Canario, y pude dar una vuelta acompañado de un local que me llevó a ver varios edificios de interés. Vaya por delante que fue un recorrido breve, ni detenido ni detallado.

De AMP ARQUITECTOS repasamos varias cosas. Vimos los edificios residenciales PROA y LAUREL: interesante el zócalo de hormigón del primero, tremendamente plástico, y las carpinterías de madera de los escaparates; duro el portal en hormigón visto. Vimos (casi mejor medio-vimos) el PABELLÓN ANA BAUTISTA, que me dijo poco. Vimos la SEDE DE LA PRESIDENCIA DEL GOBIERNO DE CANARIAS: buen edificio donde los materiales (piedra negra con distintos acabados y hormigón visto) están estupendamente usados, y las maclas de volúmenes sabiamente dispuestas: el resultado es un edificio imponente, con aspecto de fortaleza y bien implantado en su sitio; llama la atención la constante huida del ángulo recto, y son muy de notar los magníficos LAURELES DE INDIAS que crecen junto al edificio.

Vimos el ferial de SANTIAGO CALATRAVA, y dedicamos un rato a su AUDITORIO DE TENERIFE. No me llamó especialmente la atención (aunque la gran escala siempre potencia los edificios), y recuerda necesariamente a la CIUDAD DE LAS ARTES Y DE LAS CIENCIAS de Valencia, pero no cabe duda de que los maestros siempre suelen serlo, y que los acabados cuidados hacen mucha arquitectura.

Pasamos por delante del EDIFICIO MM, de FERNANDO MARTÍN MENIS. Pasamos (y no vimos casi nada) por la PLAZA DE ESPAÑA que están remodelando HERZOG & DE MEURON. Pasamos por lo que me dijeron que será el nuevo museo de arte contemporáneo de Santa Cruz. Pasamos por la SEDE DEL COAC, de JAVIER DÍAZ-LLANOS LA ROCHE y VICENTE SAAVEDRA MARTINEZ (hace años tuve que hacer alguna gestión profesional y me pareció un gran edificio, opinión que mantengo). Y pasamos, lógicamente, por la Terminal del AEROPUERTO DE LOS RODEOS.

Una pequeña muestra de lo que tiene esta ciudad que vale la pena visitar, y desde luego no solo por sus edificios: tiene una luz imponente, mar, una vegetación exuberante (¡cómo están los FLAMBOYANES!) y una isla alrededor que es una maravilla (el TEIDE ...).

Como no llevé cámara de fotos, la que utilizo la tomo prestada de las que ngbsude ha colgado en la red.

viernes, 20 de junio de 2008

EL RETRATO DEL RENACIMIENTO, en el MUSEO DEL PRADO de MADRID



Hasta el 7 de septiembre está abierta en el MUSEO DEL PRADO la exposición EL RETRATO DEL RENACIMIENTO. Yo la visité hace unos días: disfruté, me pareció interesante y da la posibilidad de ver algunas obras de gran calidad traídas de otros museos (por motivo que no vienen al caso me ha alegrado encontrar de nuevo ANCIANO CON SU NIETO, de GHIRLANDAIO, del LOUVRE), o de ver en un ámbito distinto cuadros del fondo del propio PRADO. Me llamó especialmente la atención en la última sala el retrato de CARLOS V VENCEDOR DE LA BATALLA de MÜHLBERG, de TIZIANO. También me pareció sobresaliente la forma de presentar la escultura de CARLOS V Y EL FUROR, de LEONI: el emperador de nuevo desnudo, a una altura magnífica para apreciar detalles, y situado bajo la linterna que baja desde el claustro.

Lo que no fui capaz de descubrir –por torpeza personal, o por tener un mal día, vaya usted a saber- es la línea argumental de la exposición: quizá sea necesario bucear en el catálogo. Lógicamente entendí lo que se lee en el programa y en las explicaciones con que se inicia cada una de las secciones en las que se divide la muestra, pero al ver los cuadros me pareció que, en muchos casos, no se ajustaban del todo a ese discurso teórico o, en otros casos, resultaba excesivamente obvio. Al hilo de esta consideración me vino a la cabeza lo que muchas veces me he planteado sobre la oportunidad didáctica de las exposiciones (asunto bastante manido, por otro lado), y de los propios museos: no deben ser sólo almacenes o contenedores o muestrarios de objetos interesantes o valiosos o históricos, sino auténticas ocasiones para enriquecer al visitante: que aprenda (aprendamos) a leer el arte, a profundizar en su sentido, a comprenderlo a fondo, a valorarlo en todas su facetas ... pero me estoy yendo de la exposición, y prefiero dejar el asunto para otra ocasión.

Eché de menos que no se hubieran aprovechado mejor nuevas las salas: ¿qué necesidad hay de apretar los cuadros en dos salas, cuando hay más? ¿No es posible darles más aire, más importancia? ¿No sería acertado facilitar más la visión de las obras expuestas? Cuanto agradeceríamos los visitantes poder ver mejor los cuadros, no tener que ir en fila india (y eso que cuando yo estuve no había muchísima gente). Este es otro tema que convendrá tratar con más detenimiento, cuando comente –si comento- la ampliación del museo que ha realizado MONEO.

Cuestiones menores son lo discretamente anunciada que está la exposición, la escasa información que facilita el programa de mano o lo floja que es la tienda; cuestiones menores, es verdad, pero de las que se quizá puede concluir un interés sólo relativo (¿poca confianza?) por parte de los organizadores.

martes, 17 de junio de 2008

LA CORTE DEL REY ARTURO, de MAGDALENA ABAKANOWICZ, en EL RETIRO


Con motivo de la FERIA DEL LIBRO de MADRID, que acaba de terminar, estuve de nuevo en EL RETIRO: sólo compré el último número de EL CROQUIS, con obra reciente de SANAA.

Otro día hablaré de este parque, que tiene muchísimo interés.

Ahora sólo quería señalar que pasé por el PALACIO DE CRISTAL, y entré a ver la exposición de MAGDALENA ABAKANOWICZ que el MNCARS ha organizado con el título LA CORTE DEL REY ARTURO. Las piezas expuestas, si estar mal –porque no lo estaban- no me parecieron especialmente interesantes. Les faltaba la escala habitual en los planteamientos de ABAKANOWICZ: aunque la pretende, no llega a alcanzarla; quizá faltara también un poco de unidad, o de argumento: había muchas cosas juntas. Además, la exposición ya ha terminado, por lo cual no animo a nadie a que vaya a verla.

Sí me pareció acertada la idea de configurar un espacio dentro de otro. En el interior del gran invernadero, la artista (supongo que fue ella) había levantado una tienda de campaña blanca que alojaba la mayoría de las esculturas. Y resultaba llamativo como quedaba el espacio de la estufa, partido en diagonal; me pareció especialmente llamativo lo que quedaba entre las dos pieles: un vacío entre el vidrio transparente de la estufa y el tejido blanco de la carpa, que solo contiene estructura metálica y aire.

Siempre me llaman la atención los espacios dentro de espacios, las construcciones dentro de construcciones; y este montaje, a pesar de ser bastante simple, no fue una excepción.
Para saber más de ABAKANOWICZ, se puede ver
su sitio en la red.

domingo, 15 de junio de 2008

MVRDV EN SANCHINARRO, MADRID




Como es más que sabido, la EMV de MADRID tuvo el acierto de encargar algunos edificios singulares –vivienda social- a arquitectos de interés. Aunque me consta que para algunos resulta snob, a mi me parece una actitud muy de agradecer. Una declaración de buenas intenciones que habla a su favor, a pesar de lo que se ha dicho –o al menos a mi me han dicho- sobre dejarse llevar por la moda, una gota de agua en el océano, y más simplezas de ese género. Ya comenté en seleccióARTE el edificio de CHIPPERFIELD en Villaverde. Hoy hablamos del MIRADOR de Sanchinarro.

Veo con mucha frecuencia la pieza de MVRDV, paso por delante a menudo. Desde el principio me interesó, y me sigue interesando. Enseguida fui a verla, a recorrerla, a asomarme desde el MIRADOR. El efecto icónico que tiene en SANCHINARRO es enorme: una presencia fuerte, que se hace ver, que remata la perspectiva de una vía principal de circulación, que da imagen al barrio y lo singulariza. Hay que reconocer, todo sea dicho, que difícil no lo tiene, a la vista del resto de las construcciones de la zona, en general con poco o ningún interés.

El color naranja que destaca sobre negros y grises, la composición de las fachadas con los planos de distintos materiales, los huecos y, sobre todo, la gran terraza-roto-ojo que remata el bloque, convierten este edificio, al menos para el no-usuario, en algo notable. Que se agradece. Cuantos más, mejor.

Comentario a parte merecerían los juicios poco halagadores que hicieron en su día los primeros inquilinos sobre la funcionalidad y sentido común de distribuciones e instalaciones: como no conozco de primera mano el interior de las viviendas, no me animo a valorarlos.

Dicen algunos que ya habían visto en otro sitio este proyecto de MVRDV: ¿y qué? Las buenas ideas a veces hay que desarrollarlas varias veces para ver hasta donde llegan. No es lo mejor que he visto de MVRDV (me pareció de más interés WOZOCO Housing, por ejemplo) pero me alegra tener en MADRID el MIRADOR.

Algunas fotos más
AQUÍ.
EDIFICIO MIRADOR (VIVIENDAS SOCIALES EN SANCHINARRO). MVRDV. Plaza del Alcalde Moreno Torres c/v avenida de Pi y Margall c/c calle Princesa de Éboli. 28050 MADRID.

jueves, 12 de junio de 2008

VÍCTOR OCHOA, ESCULTOR, en EL RETIRO



Hace unos día me acerqué a ver la exposición sobre pintores ingleses en la España del XIX que se muestra en EL RETIRO. Dejo un brevísimo comentario porque no tengo mucho que decir: cuadros de técnica correcta – algunos incluso buena- pero con unas temáticas que a mí me ponen malo, tan tópicas, tan cursis, tan falsamente españolas ... al menos vistas desde hoy: seguramente éramos un país de alpargata y mantón de Manila, pero a mí me desagrada ver que en la imagen que dábamos los españoles en el XIX (y que tanto a cristalizado) todos parecemos toreros o bandoleros o bellas aguadoras en parajes polvorientos. Es verdad que hay algunas acuarelas de interés: todo hay que decirlo.

Dejo constancia de esa visita porque en el exterior de la CASA DE VACAS se ha colocado una escultura ciclópea de VÍCTOR OCHOA (de quien no tengo referencia alguna) que resulta potente: un hombre sentado, desnudo, abrazándose las piernas y con la cabeza recogida entre rodillas. Un hombre meditando, cerrado en sí mismo. Un hombre fuerte, de bronce. Un hombre con restos de intemperie.

El único título que aparece es ESCULTURA MONUMENTAL, que puede parecer un genérico- lo es-, pero que al ver aquello resulta acertado, porque la pieza (la única pieza, una escultura monumental) demuestra que el tamaño es un parámetro importante: hemos visto esa misma figura mil veces, pero esta llama poderosamente la atención.

martes, 10 de junio de 2008

DOBLE ESPACIO en el AEROPUERTO DE BARAJAS de MADRID


La Fundación AENA presenta en el Aeropuerto de Barajas la muestra DOBLE ESPACIO durante los meses de junio y julio de 2008. La verdad es que muy pocas veces, por no decir nunca, cuando he ido o he vuelto por la T2 he dedicado un segundo al espacio expositivo que se encuentra al salir del aparcamiento. Pero DOBLE ESPACIO me ha llamado la atención.

Se trata de una mini-exposición de fotografías (un “muro gordo” de aproximadamente 10 metros de largo y uno de ancho es todo el soporte que tienen) de JAVIER BERGUIZAS y RAÚL URBINA, presentadas de dos en dos, por parejas. Intentan ofrecer un paralelismo visual entre Madrid y su aeropuerto. Y hablan del no-espacio como origen de su reflexión.

Debo reconocer que me han llamado más la atención las fotos de BERGUIZAS que las de URBINA, quizá porque resulta más sencillo transmitir con una ciudad entera que con las tripas de un aeropuerto. En Méndez Álvaro. 17:45h BERGUIZAS trabaja el no-espacio (una persona que miraba las fotos comentó que le recordaba a las imágenes urbanas de Vermeer, supongo que por los ladrillos); en Plaza de Colón. 19:15h está magníficamente cogida la luz; Cerro de los ángeles. 12:45h resulta inquietante: un horizonte muy gris, amenazante, y una escalera de salida a ninguna parte; con Madrid Norte. 11:39 h consigue que la escalera que fotografía se descomponga y, con las sombras de otra estructura, llegue a desaparecer hasta formar una nueva imagen; General Pardiñas. 13:40 h es, en mi opinión, lo mejor que se presenta en la muestra.

Sobre los paralelismos (algunos de difícil lectura: ¿dónde está el paralelismo?), hay dos que me han llamado más la atención: Respiradero nivel –1 y –2. 12:23h de URBINA frente a C/ Válgame Dios. 18:00 h de BERGUIZAS, que presentan claramente una historia en dos imágenes: en la primera, el camino de huida, y en la segunda, el reflejo de la escapada a toda prisa por la ciudad, en un visto y no visto; y Escalera del NET nivel –1. 18:15 h de URBINA frente a Mercado Moratalaz. 19:30 h de BERGUIZAS, en este caso por la cerrazón que representan, sin salida, todo negro.

Un último apunte sobre los títulos: el empeño en señalar las horas en las que supuestamente han sido tomadas las fotos, es interesante, porque habla de la luz.

Buscando en la red he encontrado
estas fotos de BERGUIZAS.

sábado, 7 de junio de 2008

SEICENTO NAPOLETANO en la RABASF de MADRID


La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando expone, hasta mitad de julio, pintura napolitana del XVII. Señalan en alguno de los textos que acompaña la muestra que este periodo ha sido ensalzado por los mejores especialistas del barroco italiano. Yo fui a verla, y salí pensando que no deben haber traído lo más relevante del periodo. Es verdad que hay cuadros interesantes, y que el recorrido teórico que pretenden hacernos entender (desde un primer naturalismo hasta la liberación del barroco, dicen) tiene cierto sentido al avanzar por las salas. Pero parece que no hay mucha calidad: una estupendo colección de primeras segundas firmas.

Tiene interés las composiciones más monumentales: la VILLA CON PÓRTICO Y BALDAQUINO, por ejemplo.

En cualquier caso, como creo que ya he señalado alguna otra vez en selecciónARTE, siempre se aprende algo, de cualquier exposición uno sale con más de lo que entró. SEICENTO NAPOLETANO no es imprescindible, pero tampoco resulta definitivamente prescindible.

martes, 3 de junio de 2008

LA INSOLACIÓN, DE CARMEN LAFORET

Este texto no estaba escrito para selecciónARTE, al menos no tan largo como lo publico ahora, pero como tuvo poca fortuna en otros foros –demasiada extensión, parece- dejo aquí constancia de lo escrito sobre una novela que vale la pena leer ...

Martín tiene 14 ó 15 años cuando comienza LA INSOLACIÓN. Es un chico huérfano de madre, con su padre, (Eugenio Soto) recién casado con otra (Adela), que durante el invierno vive con sus abuelos maternos y pasa el verano en Beniteca (un pueblo imaginario de la costa levantina) donde está destinado su padre, con él, con su madrastra y con las hermanastras que va teniendo anualmente. Martín es sensible, con gran capacidad para la pintura y el dibujo, pero lleva una vida monótona y sin interés: Eugenio es la clásica caricatura de militar de la posguerra española, muy “macho”, que razona poco y para quien las cosas se hacen porque hay que hacerlas, coño! Adela, su madrastra, no le puede ni ver. Sus abuelos son buenos, le quieren y le cuidan, pero son mayores.

En el primer verano del libro (se narran tres veranos, con sus correspondientes intermedios: los cursos escolares que los separan) conoce a unos vecinos, los hermanos Anita y Carlos Corsi, que viven solos con la estrafalaria y sabia Frufrú en una casa alquilada, la casa del inglés Mr. Pyne. Anita es frívola, le importa poco la opinión de los demás y de divierte jugar con los sentimientos de los otros. Carlos es guapo, fuerte, y a la vez vulnerable y limitado, sin intereses más allá de lo inmediato y sólo preocupado por atraer la atención de su hermana mayor. Martín, un adolescente estándar, para quien los Corsi son magnéticos. Viven en un mundo completamente distinto a su mundo, y en cuanto se relaciona con ellos queda fascinado: libertad, un punto de sofisticación, cosmopolitismo, osadía, gran seguridad personal, cierto misterio en las relaciones familiares, belleza física y actitud sensual, se enfrentan a un mundo plano, gris, de estereotipos: abuelos buenos, padre militar simplón y bruto, madrastra tosca, envidiosa, celosa y constantemente embarazada.

Durante el primer verano, Martín es el segundón del grupo, que lidera siempre Anita, a quien Carlos sigue a pies juntillas. Los Corsi son aparentemente mayores, con capacidad de hacer cualquier cosa. Los vemos egoístas: Anita sólo piensa en ella, Carlos quiere a Anita sólo para él. Martín –martín pescador, como le llaman sus amigos- es un divertimento, que olvida todo lo que lleva dentro al estar con ellos.

Con el tiempo cambian las tornas, y es Martín quien se nos presenta maduro y profundo entre dos amigos simplones e infantiles, sin profundidad: vosotros me recordáis a los monos (...). Llegáis, lo tocáis todo y después os quedáis tan tranquilos. No os importa nada de nada. Muchas veces me pregunto si tendréis incluso inteligencia normal, llegará a decirles durante el tercer verano (pg 277). Pero aún entonces Martín se mantiene en el papel de actor secundario: primero lo ha sido de forma inconsciente, dejándose arrastrar, y después lo es de forma conscientemente, para conservar la amistad:“Martín comprendió que la felicidad es resultado de una serie de concesiones entre los que se quieren” (pg 289); “como si hubiera renunciado a lago grande –él, sus ideas, su fondo- por otra cosa más valiosa aún” –la amistad de los Corsi (pg 291).

Cuando Martín intenta manifestar lo que va descubriendo en su interior, esa paulatina adquisición de profundidad y madurez, Carlos lo ve como algo malo, como una enfermedad de Martín, una insolación, que le lleva decir cosas aburridas y parecer un cura predicando; también Martín lo ve un poco así, aunque desde otra perspectiva, pues cuando llega a Beniteca LA INSOLACIÓN le hace olvidar todo lo que de verdad lleva dentro, escaparse de la realidad, para ser el títere de sus amigos. La presencia constante del calor del verano, refuerza también la idea de insolación que trastorna al protagonista.

La novela –primera parte de una trilogía de la que no se ha publicado la tercera- acaba con el truncamiento violento de esa amistad por la simpleza de Eugenio Soto, provocada por una sugerencia maliciosa del médico del pueblo, Don Clemente (a quien los tres amigos han puesto en una situación comprometida durante el segundo verano), y aprovechada y azuzada por Adela.

LA INSOLACIÓN está muy bien escrita (CARMEN LAFORET es una gran escritora), se lee muy bien y dice muchas cosas sobre la adolescencia y el deslumbramiento que supone salir del mundo propio para entrar en otro casi mágico pero, a la larga, irreal, ficticio; burbuja que con enorme facilidad se pincha y queda en nada, deja amargura. Los personajes secundarios están bien dibujados, apoyan con fuerza la definición de los principales y de su entorno, que apenas queda esbozado: el Señor Corsi y el poeta Oswaldo perfilan a Anita y Carlos; Don Clemente y Doña María reflejan el ambiente social del pueblo; Damián y Carmen retratan el ambiente político de la época. El recurso a expresiones en otros idiomas (el francés que Ana y Carlos pretenden hacer pasar por alemán, el italiano del Señor Corsi cuando llama pescatore a Martín) o las pronunciaciones singulares (el ñiños o el demoños de Frufrú, los sudamericanismos de Oswaldo) dan color y gracia al texto. También las sensaciones del verano se hacen presentes con acierto en el texto: el calor, ya citado; el agua salada del mar; la arena de playa pegada en los cuerpos; la preciosa imagen de la luz de colores que baña la habitación de Martín, volviéndola también un poco irreal, fantástica ...

No hay que olvidar, en cualquier caso, que es un primera parte: aunque la trama se cierra, la autora tiene en la cabeza un desarrollo del tema más largo del que presenta LA INSOLACIÓN: hay que ver cómo continúa para poder valorarla completamente.

LA INSOLACIÓN. CARMEN LAFORET. Ediciones DESTINO, colección ÁNCORA Y DELFÍN. Volumen 1085

domingo, 1 de junio de 2008

CABECERA DE MAYO


Para dejar constancia de las cabeceras que han ido abriendo selecciónARTE a lo largo de los meses, iré dejandolas aquí a medida que las sustituya.

La de mayo de 2008 era un detalle de CAMPOS DE ALFALFA, SAINT-DENIS, de GEORGES SEURAT. Óleo sobre lienzo, pintado entre 1885-86, se conserva en la National Gallery of Scotland, Edinburgh.