martes, 7 de julio de 2009

PARAÍSO INHABITADO, de ANA MARÍA MATUTE


La última novela de ANA MARÍA MATUTE cuenta la infancia de Adriana, hija pequeña (la menor de cuatro hermanos) de unos padres separados, una “familia bien” que vive en Madrid en los años 20 y 30 del siglo pasado (antes de la guerra civil, en cualquier caso). La infancia de Adri no es fácil: como ella misma dice al comenzar el texto, “nací cuando mis padres ya no se querían”, y su mundo está en la cocina, con el servicio, la parte de la casa donde la madera del suelo no está encerada. Adri es espabilada, creativa, lista, nada convencional; su madre y su hermana mayor son productos típicos de la sociedad de su momento; su padre no vive en casa; su tía Eduarda, tan singular, tampoco resulta convencional, y Adri se entiende estupendamente bien con ella. Saint Maur, el colegio francés para señoritas al que comienza a ir, es una tortura. En estas aparece Gavrila en el patio de la casa donde viven, la zona de los chóferes y el portero: es el hijo de una bailarina rusa, protegida de El Conde, que acaba de trasladarse al inmueble; unos años mayor que Adri, el aspecto de Gavi es formidable, muy bello. Se conocen, empiezan a jugar juntos y arranca una historia de amistad/amor que sirve de tema central de PARAÍSO INHABITADO. ANA MARÍA MATUTE nos cuenta cómo nace ese amor, y cómo toma cuerpo; nos cuenta la primera pérdida de un ser querido y con ella la pérdida de la inocencia infantil.

PARAÍSO INHABITADO se trata, sin duda, de una buena novela. Está bien escrita, con oficio y sensibilidad. Adriana está perfectamente caracterizada. Los personajes secundarios son estupendos: Eduarda, Isabel, Tata María, Teo ... todos. El ambiente de la época muy bien cogido. Resulta muy acertado el recurso de utilizar como narrador a una persona adulta, que nos relata su infancia, y no a una niña contando su vida. Así ANA MARÍA MATUTE puede profundizar en las situaciones, analizarlas y sacarles partido, sin caer en un personaje de esos que de tan listos y avispados resultan falsos, es imposible que sean niños.

Es verdad que en algún pasaje MATUTE se extiende más de la cuenta al describir situaciones, y que en otros se hubiera agradecido un poco más de contención, de sobriedad (dos o tres momentos me ha resultado cursilones ...), pero eso no empaña una buena novela sobre la infancia y el amor inocente, con ese sabor (estilo) de las obras españolas de posguerra, maravillosas, que vale la pena leer.

6 comentarios:

Isi dijo...

Yo de momento y para comenzar con esta autora, tengo prestado de la biblio "primera memoria" elegida, además, por recomendación tuya.

Si me gusta, ya iré apuntando los demás títulos :)

xGaztelu dijo...

ISI, una buena opción que espero te guste: ya nos contarás.

xG

Ion Egúzkiza dijo...

Gracias por el post. Tomo nota.

xGaztelu dijo...

De nada, ION: si acabas leyendo PARAÍSO INHABITADO ya nos dirás qué te parece.

xG

espumadelosdias dijo...

acabo de leerlo en la playa.Me pareció maravilloso, aunque muy triste. La infancia tan dulce tan querida, ten temida...
Gracias por el post

xGaztelu dijo...

ESPUMADELOSDIAS, que bien suena eso de “leerlo en la playa” ... PARAÍSO INHABITADO, bueno y triste, es cierto: coincido contigo.

Seguiré tu blog, que no conocía y tiene tan buena pinta.

xG