miércoles, 21 de noviembre de 2012

LOS ENAMORAMIENTOS, de JAVIER MARÍAS

Tenía LOS ENAMORAMIENTOS en casa desde que se publicó el año pasado, pero en la parte más baja del montón de libros pendientes: me dijeron que no aportaba nada distinto de lo ya leído en TU ROSTRO MAÑANA, y no me lancé. Con motivo de la concesión del PREMIO NACIONAL DE NARRATIVA cambié de idea, y acabo de terminarlo. Efectivamente: LOS ENAMORAMIENTOS no es que sea una novela prima de TU ROSTRO MAÑANA, sino que son hermanas, y de las que se llevan bien; no son gemelas, pero sí parecidas hasta límites que sorprenden.

En LOS ENAMORAMIENTOS, María Ducay nos cuenta su relación con Luisa y Miguel Desvern (o Deverne, depende …), y con Javier Díaz-Varela, el mejor amigo de Miguel. María nunca ha hablado con Luisa ni con su marido, una Pareja Perfecta a quienes ve desayunar a diario en una cafetería próxima a la editorial donde trabaja. De repente esa costumbre se interrumpe, y María se entera de que Miguel ha sido asesinado -a navajazos y sin motivo aparente: pura casualidad, mala suerte- por un indigente fuera de sus cabales. Tiempo después Luisa aparece de nuevo en la cafetería, María le da el pésame, y tienen una larga conversación; a través de Luisa, María conoce a Díaz-Varela, y se convierten en amantes. Ya no puedo contar más, porque aunque la trama de LOS ENAMORAMIENTOS tampoco tiene gran qué, a partir de aquí la novela da un giro, y la destriparía. Al hilo de esta historia, LOS ENAMORAMIENTOS nos habla del amor, de lo que el amor puede provocar, de la muerte, del olvido, de la responsabilidad de nuestras acciones.

LOS ENAMORAMIENTOS me parece una novela brillante, como lo es JAVIER MARÍAS. Pero en esta ocasión repite fórmula. Todo lo que ya dije en selecciónARTE sobre su estilo se puede aplicar, sin cambiar una coma, a esta nueva novela: la imprecisión en las personas (¿Desvern, o Deverne?); la alteridad (“no soy yo sino otro al que han matado, no soy yo”); el texto en cascada, que va cayendo sin parar en párrafos larguísimos que avanzan pasando de una cosa a la siguiente con aclaraciones de la anterior, llenos de símiles y ejemplos, llenos de repeticiones (“historias absurdas cuando no pretenciosas cuando no truculentas cuando no patéticas, salvo excepción”), una forma de avanzar que podría ser monótona pero que es magnética; los golpes de humor; la teoría de el último momento (esa circunstancia con la que acaba la vida de uno, y que resulta tan dramática o tan poderosa que elimina el resto de la biografía del difunto); el pensamiento supuesto: un personaje supone lo que otro habrá pensado, y lo desarrolla con minuciosidad (y, además, acierta …); las referencias a otras novelas; el juego con SHAKESPEARE ...

Me ha parecido ingenioso lo que llamé, al tomar nota, el triunfo de los feos: “Las cosas más improbables han sucedido, y eso todos lo intuimos, hasta los que no saben nada de historia ni de lo acontecido en el mundo anterior, ni siquiera de lo que ocurre en este, que avanza al mismo paso indeciso que ellos. Quién no ha asistido a algo así, a veces sin reparar en ello hasta que alguien nos lo señala con el dedo y le da formulación: el más torpe del colegio ha llegado a ministro y el holgazán a banquero, el individuo más tosco y feo tiene un éxito loco con las mejores mujeres, el más simple se convierte en escritor venerado y es candidato al Premio Nobel, como quizá lo sea de veras Garay Fontina, vendrá acaso el día en que lo llamarán de Estocolmo; la admiradora más pesada y vulgar logra acercarse a su ídolo y acaba casándose con él, el periodista corrupto y ladrón pasa por moralista y por paladín de la honradez, reina el más remoto y pusilánime de los sucesores al trono, el último de la lista y el más catastrófico; la mujer más cargante, engreída y despreciativa es adorada por las clases populares a las que aplasta y humilla desde su sillón de dirigente y que deberían odiarla, y el mayor imbécil o el mayor sinvergüenza son votados en masa por una población hipnotizada por la vileza o dispuesta a engañarse o quizá a suicidarse; el asesino político, en cuanto cambian las tornas, es liberado y aclamado como patriota heroico por la multitud que hasta entonces había disimulado su propia condición criminal, y el patán más clamoroso es nombrado embajador o Presidente de la República, o hecho príncipe consorte si por medio anda el amor, el casi siempre idiota y desatinado amor. Todos aguardan la oportunidad o se la buscan, a veces depende sólo de cuánta voluntad se ponga en la consecución de cada anhelo, cuánto afán y paciencia en la de cada propósito, por megalómano y descabellado que sea.”. Una verdad como un piano de cola: creo que podría poner ejemplos de casi todo.

Y he encontrado alguna palabra que no conocía, que no recuerdo haber oído nunca, de esas que hay que buscar en el diccionario: VAGAROSO (1. adj. Que vaga, o que fácilmente y de continuo se mueve de una parte a otra. U. m. en leng. poét. 2. adj. ant. Tardo, perezoso, pausado).

Para quienes disfrutamos con MARÍAS, leer LOS ENAMORAMIENTOS es un gustazo; y, a la vez, un poco engaño. Tal vez por eso JAVIER MARÍAS no aceptó el Premio que le concedieron: ha dado muchas razones, todas verdaderas, seguro. Pero he llegado a pensar que la principal razón es que él sabe que no se lo merece, no por LOS ENAMORAMIENTOS: al fin y al cabo una obra menor en su producción, un clon de otra obra, esa sí que magistral.

4 comentarios:

Elena Rius dijo...

También está en algun lugar un poco lejano de mi lista. Por mucho que admire a Marías como escritor, estoy segura (tu reseña lo corrobora) de que esta obra no me va aportar nada que no haya visto ya. Aunque seguro que constituye un rato de lectura inteligente y agradable. Me ha gustado mucho ese párrafo que citas sobre "los feos": una verdad como una catedral. Con algo de experiencia de la vida, es imposible no darse cuenta de que para medrar el talento y las cualidades valen mucho menos que el empeño y la ambición desaforada.

xGaztelu dijo...

ELENA, lo explicas estupendamente: "nada que no haya visto ya; un rato de lectura inteligente y agradable". Tal cual. Y sobre los feos, al abir la página de El Mundo veo un titular de PEREZ REVERTE que insiste en este punto: "cada vez tienen más sitio los idiotas". No es lo mismo, pero se parece: habrá que leer la entrevista completa ...

xG

Varenka dijo...

Vaya, estoy ahora con Corazón tan blanco. La primera novela que leo de Marías (si ya se..), aunque ya veo que no será la última.

Y la cita, es leerla y ver las caras de cada uno. Gracioso y deprimente a la vez.

xGaztelu dijo...

VARENKA, CORAZÓN TAN BLANCO también fue mi primera novela de MARÍAS, hace ya tanto que apenas me acuerdo del argumento (estoy tan viejo ...) pero sí tengo el recuerdo de que me gustó mucho. Ya nos contarás si conectas con él, o si al final te parece que no hay que repetir.

xG