Había visto muchas veces la imagen del cilindro compuesto por “termos” plateados, y me había llamado la atención, pero no había ido a ver aquello. Cuando me enteré de que el ECOBULEVAR del estudio ECOSISTEMA URBANO (Belinda Tato, José Luis Vallejo y Diego García-Setién) es uno de los dos proyectos madrileños que se recrearán en SHANGAI 2010 decidí que debía acercarme, y allí estuve hace unos días.
Entiendo el ECOBULEVAR del madrileño ENSANCHE DE VALLECAS como una solución para espacios públicos que consiste básicamente en la instalación, dentro de la trama urbana en desarrollo (ellos dicen la no-ciudad), de tres chiringuitos cilíndricos –que han llamado árboles de aire- que pretenden sustituir la domesticada naturaleza urbana todavía inexistente, y ser catalizadores y receptores de la vida del barrio creando espacios lúdicos y de esparcimiento. Pretenden aglutinar a los vecinos consiguiendo entornos gratos tanto por su diseño como por sus condiciones naturales: vegetales, climáticas –temperatura, humedad, corrientes de aire, sombras-, de esparcimiento y estancia, de protección y separación respecto al entorno, etc. Los creadores del invento hablan de integración e intercambio social, de un lugar para la gente, de autosuficiencia energética, de sostenibilidad ... y llenan aquello de paneles fotovoltaicos, de captores de viento, de pantallas de led con información medioambiental, de plantas, de bancos, de algunos columpios, de suelos de caucho blanditos ...
Se trata de un planteamiento original, bien vendido y bien construido. Divertido, si se quiere. Puede gustar más o menos, pero creo que como solución técnica y constructiva, incluso estética, no está mal.
El grandísimo pero que yo le pongo, el defecto que tiene el conjunto es, en mi opinión, lo tremendamente artificioso que resulta: si como dicen los propios autores del proyecto, la mejor solución era una masa de auténticos árboles de buen porte, y su solución no es más que una prótesis temporal en la no-ciudad ¿de verdad era necesario semejante montaje? Como investigación, bien; como solución real, excesiva; como icono del nuevo barrio, escaso.
Para quien no se pueda acercar, aquí dejo una imágenes. Para quien quiera hacerlo, la dirección es Bulevar de la Naturaleza, s/n. Ensanche de Vallecas, Madrid, aunque como tantas veces lo mejor es buscarlo en google para situarse ... y lanzarse a al aventura.
Para acabar quiero hacer una referencia a los edificios del entorno: seguramente diré algo en seleccióARTE más adelante, pero algunos tiene bastante interés.
El grandísimo pero que yo le pongo, el defecto que tiene el conjunto es, en mi opinión, lo tremendamente artificioso que resulta: si como dicen los propios autores del proyecto, la mejor solución era una masa de auténticos árboles de buen porte, y su solución no es más que una prótesis temporal en la no-ciudad ¿de verdad era necesario semejante montaje? Como investigación, bien; como solución real, excesiva; como icono del nuevo barrio, escaso.
Para quien no se pueda acercar, aquí dejo una imágenes. Para quien quiera hacerlo, la dirección es Bulevar de la Naturaleza, s/n. Ensanche de Vallecas, Madrid, aunque como tantas veces lo mejor es buscarlo en google para situarse ... y lanzarse a al aventura.
Para acabar quiero hacer una referencia a los edificios del entorno: seguramente diré algo en seleccióARTE más adelante, pero algunos tiene bastante interés.
ECOBULEVAR EN EL ENSANCHE DE VALLECAS. ECOSISTEMA URBANO. Bulevar de la Naturaleza. 28031 MADRID
No los he visto aún, pero parecen una especie de prótesis, sí. Lo que no me queda claro es si los autores piensan desmantelarlo cuando los árboles que se hayan plantado sean grandes y por lo tanto, sea innecesaria la prótesis. En ese caso no estaría mal.
ResponderEliminarDe todos modos parece que a los vecinos no les ha entusiasmado, porque no veo a que nadie por ahí.
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Soy vecina del Bulevar. No estoy para nada encantada con estas cosas. Atraen a gamberros, que se han dedicado a tirar todas las piedrecitas, rompiendo varias luces de uno de los árboles; rompiendo en varias ocasiones los columpios; destrozando ese suelo "blandito", y haciendo pintadas. Encima el ayuntamiento no se a dignado, en más de un año, en mandar a ningún equipo de jardinería para arreglar los árboles reales, a los que les ha crecido una gran cantidad de hierbajos. Y un largo etcétera que crea un ambiente de total abandono e incivismo. Lo que más pena me da es que casi todos los días me encuentro grupos de turistas extranjeros con sus cámaras, y grupos de estudiantes de arquitectura, supongo, contemplando esta vergüenza. El alcalde estará muy contecto... pero lo que somos los vecinos, NO.
ResponderEliminarHola, visitante anónimo (o mejor, anónima). Tienes muchísima razón, y tocas uno de los temas más delicados de la arquitectura, que es el uso y el mantenimiento y la durabilidad de las obras. En otra ocasión hemos rozado este asunto en selecciónARTE con motivo de algún comentario de LOQUEMEAHORRO, si no recuerdo mal.
ResponderEliminarMi opinión es que de nada valen unas fotos magníficas del día de la inauguración –todo políticos sonrientes, o arquitectos encantados y rodeados de famosillos- si después aquello no sirve, o se convierte en un foco de basura, o no hay quien viva dentro, o envejece de tal manera que en poco tiempo da pena verlo ... El secreto, como siempre, está en construir para la gente, y no para las revistas especializadas, pero no todos son capaces de entenderlo. El ECOBULEVAR tenía claramente ese peligro, porque es una cosa tremendamente artificial y, por lo que dices, desgraciadamente se confirman las malas expectativas.
Cambiando de tercio, estoy preparando una entrada en la que vuelvo a hablar de esa zona: no como tema principal, pero sí como ejemplo de algo que tengo en la cabeza sobre el color y la arquitectura; a lo mejor incluso hablo de tu casa ... Me interesará tu opinión.
Gracias por tu aportación,
xG